Euge Lemos Para Paparazzi

Directa, concisa y precisa, a Eugenia Lemos (26) no le tiembla el pulso. Arriba del escenario de Despedida de soltero (teatro Candilejas) deja boquiabierto a cuanto espectador la contemple. Y debajo, la modelo de Leandro Santos Models atiende a todo aquel enemigo que se le presenta en el camino.“Soy una mujer con carácter, más inteligente que brava. Mis grandes rivales tienen que ver con el rival que le hace ruido a la gente, soy la voz del pueblo”, arremete.

–¿Cinthia Fernández es un ejemplo de eso?
–Más allá del hilo dental, de su popularidad porque tiene los abdominales marcados y dos siliconas muy grandes, no es referente de lo que la mujer admira. Por ejemplo, Marcelo Polino es un hombre al que mucha gente no quiere, y yo coincido con ese pensamiento. Quizá por eso logré que en poco tiempo me apoye tanto público.

–¿Graciela Alfano es otro ejemplo de los no queridos?
–Aunque a veces Graciela me divertía, cuando le tuve que poner los puntos, lo hice. No tengo pelos en la lengua, pero en mi casa no soy de contestarle así a mi hermano, mi mamá, o el perro. En mi vida cotidiana soy sencilla y afectuosa. Pero si en el medio no ponés las cosas en claro, te pasan por arriba. Fijate cuántas salieron de Gran Hermano o se hacen las hermanas para llamar la atención, y las pasan por arriba. Entonces, se terminan refugiando en hacer un topless para salir en una revista.

–Ultimamente se mostraron en topless Ayelén Paleo, las hermanas Pombo, Rocío Gancedo…
–Ellas solas muestran el cartel que dice “vendo carne para hombres”. Se ponen en el nivel de íconos sexuales para que el hombre mire y haga sus cositas, nada más. Ponerse en topless es el último recurso de bajeza femenina que existe. Se nota que no tienen otra cosas a la que recurrir. En el medio necesitás diferentes colores: gente inteligente, con carácter, una buena cola y lolas, y chicas de relleno que siempre van a ser del montón. Aunque Cinthia haya logrado un montón de cosas, nunca ganó un concurso del que participó. Va a llegar hasta ahí, pero nunca va a ganar nada. A la gente le gusta el famoso con carisma. Lucho por el modelo de belleza natural, sin siliconas, que trata de aceptarse como es. Claro que hay que cuidarse, pero también está bueno aceptarse. Mi mensaje es menos autoexigente y enfermizo. Lo femenino viene de adentro. Cinthia tiene tremendo lomo, pero no es femenina.

–¿Qué le recomendarías a Cinthia?
–Tiene que bajar un cambio. Cuando disentís tanto con la opinión del público es porque te creés que estás en otro lugar, no te considerás una persona común y corriente. Cuando te subís al pony, empezás a pensar de otra forma y te alejás del que está en su casa.

–¿Hay mucha chica con poco cerebro en el ambiente?
–¡Está lleno! Cinthia contesta pero siempre termina puteando, desquiciada, no pudiendo mantener la cordura. Se le salta la chaveta y se pone desagradable. Es parte del medio saber jugar una buena pelea. Cinthia es egocéntrica, banal, narcisista, y no le llega el agua al tanque.

–¿Te imaginás como jurado de Bailando por un sueño?
–Ahora no porque lo que más quiero es laburar de actriz. Pero en el futuro me divertiría mucho hacerlo, porque sería un escándalo andante. Tendría tanto lío como Alfano, sería sentimental como Mendoza y en algunos momentos pondría cara de perro como hace Polino, porque cuando me ensaño con alguien, me ensaño. Y también tendría la elegancia de Pachano. Siendo tan nueva en el medio podría dar mucho más que Silvina Escudero y Amalia Granata. Silvina tiene un lenguaje de baile que le da un plus más que a Granata, pero todo el tiempo están luchando por llamar la atención y se desvían de su rol. Escudero tampoco tiene una personalidad que sea querida. Hay mucha gente que le tiene rechazo porque es rara al expresarse y no se la ve transparente. A Silvina le quedaría muy grande el jurado del Bailando. Imaginate a Pachano al lado de Silvina, no tendría razón de ser. Además, no aceptarían estar sentados al lado de ella, de alguien con tan poca trayectoria.